Se debe estar vigilantes para ver si aparecen problemas de conducta asociados como una actitud desafiante, teniéndose que considerar entones el diagnóstico del Trastorno Negativista Desafiante (TND), una problemática que se acrecienta con los años y que el devenir la pubertad hace que sea muy difícil el manejo de estos chicos, con el peligro de que sus padres los dejen por imposibles.